El globo del intelecto

Puede suceder que el intelecto se infla como un balón lleno de gas cuando una persona lee mucho. Si esta persona hiciera autointrospección vería que su intelecto está atado al corazón mediante el cordón de la voluntad, y que el corazón necesita respirar y expandirse para tomar una bocanada del Amor de Dios.

Además podrá observar que su balón del intelecto, lleno de "gases ligeros", se va elevando como un globo y va jalando fuertemente al cordón de la voluntad de tal manera que la entrada a las recámaras espirituales del corazón se cierran muy firmemente y las dádivas divinas ya no pueden ingresar en ellas.

¿Y qué consecuencias trae todo esto?

¡Las dudas! Las dudas sobre la verdad, sobre la existencia del alma, sobre el Amor verdadero, sobre el Espíritu, la Vida eterna, etc.

¿Por qué?

Justamente porque las dádivas vivas de Dios resbalan entre los extremos del cordón de la voluntad, hacia arriba y hacia abajo, y no encuentran entrada alguna, ni en el primero (el intelecto), ni en el segundo (el corazón).

Por eso Dios tiene que actuar y quitar un poco de aire al intelecto, para que el globo del intelecto pueda bajar y así aflojar el cordón para que el corazón atado pueda recibir nuevamente "aire".

Por eso, de vez en cuando, Dios le presenta al intelecto cosas envueltas en cáscara dura y en forma escondida con el fin de humillar un poco al intelecto.

Esta cáscara impide que la verdad pueda ingresar a través de los finos poros del balón de su intelecto, pero también para pueda permitir que la Verdad pueda encontrar entrada en el momento cuando el intelecto desciende al corazón.

Entonces ¿cuál es el estado conforme al orden divino?

Este debe ser el siguiente:

El corazón es ampliado paulatinamente a través de la bajada humilde del intelecto hasta que el corazón lo acoge dentro de sí. El intelecto es calentado allí por el amor y se expande dentro del corazón. Con esto, el amor sufre cada vez más tensión, se enciende al final en su sublime calor, y la luz de su suave llama ilumina dulcemente al intelecto con una suave claridad.

Recién entonces resplandecen los tesoros del cielo en el intelecto, y, debido al calor de la luz, crecerán gradualmente y se diferenciarán y estructurarán cada vez más (como viéndolos bajo el microscopio) - de ello resulta entonces el hermoso entendimiento de corazón (y no del intelecto), que es el entendimiento del Amor y de la verdadera y viva Fe, y la semilla de mostaza se convierte en un árbol que invita, no solo a las aves del cielo (a tomar morada en sus ramas), sino finalmente también a Jesús, nuestro Padre.

Leer mensaje original en: http://jakoblorberperu.blogspot.com/2024/04/la-posicion-sobre-la-iglesia.html

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