Acerca de los sentidos del alma

Contenido

El siguiente diálogo lo realiza un conocedor de la Nueva Revelación dada a Lorber con una persona sabia terrenalmente. Aquí el diálogo:

¿Cuál es la diferencia entre entender y razonar?

Bueno, la diferencia entre entender y razonar radica en el proceso y el propósito de cada acción:

  1. Entender:

    • Es el acto de captar el significado, la naturaleza o la esencia de algo.
    • Involucra la capacidad de reconocer y asimilar información, ya sea de manera intuitiva o directa.
    • Ejemplo: Entiendes un idioma cuando sabes lo que significan las palabras que alguien dice.
  2. Razonar:

    • Es el proceso de analizar, reflexionar y llegar a conclusiones utilizando la lógica.
    • Requiere conectar ideas, evaluar información y sacar inferencias o deducciones.
    • Ejemplo: Razonas cuando comparas dos soluciones a un problema para determinar cuál es la mejor opción.

En resumen:

  • Entender implica captar o percibir algo.
  • Razonar implica usar la lógica para procesar o construir conocimiento.

¿Qué dirías si considero los ojos y oídos del cuerpo como una correspondencia al entendimiento y razonamiento del alma?

Lo que afirmas puede tener sentido si se analiza desde un punto de vista simbólico o espiritual, más que literal. Vamos a desglosarlo:

  1. "Los ojos del cuerpo físico corresponden al entendimiento del alma":

    • Los ojos son el órgano que nos permite ver y captar el mundo externo. Si se relacionan con el entendimiento del alma, esto podría interpretarse como que el alma "ve" y percibe su entorno, captando de manera inmediata la esencia de las cosas, similar a cómo los ojos captan imágenes.
    • En filosofía o espiritualidad, el "ver" está asociado con comprender de manera intuitiva o directa, sin necesidad de procesos complejos de razonamiento.
    • Este paralelismo tiene cierta lógica en cuanto a cómo se simboliza la percepción directa como un entendimiento claro.
  2. "Los oídos del cuerpo físico corresponden al razonamiento del alma":

    • Los oídos implican escuchar, lo cual requiere atención y procesamiento de información en el tiempo. Si se asocian con el razonamiento del alma, podría interpretarse que el alma "escucha" y analiza las ideas o el conocimiento recibido, como los oídos procesan las palabras y sonidos.
    • Razonar implica tiempo, reflexión y análisis, procesos que pueden compararse con escuchar atentamente y discernir significado.

Análisis general:

La frase tiene coherencia simbólica si la interpretamos desde una perspectiva metafórica. Los ojos representan la percepción inmediata (entender) y los oídos simbolizan la recepción y análisis (razonar).

Desde un punto de vista estrictamente lógico, las correspondencias no son absolutas, pero son válidas como analogías que relacionan funciones físicas con capacidades espirituales o mentales. ¿Quieres que lo exploremos más profundamente? 😊

Dame más detalles

1. Los ojos del cuerpo físico como entendimiento del alma

Características de los ojos físicos:

  • Proveen percepción directa e inmediata.
  • Captan imágenes y escenas completas al instante, pero sin analizarlas en profundidad.
  • Son una herramienta pasiva que recibe estímulos externos.

Relación con el entendimiento del alma:

  • El entendimiento puede considerarse un acto de captar una idea o concepto en su totalidad, casi de manera "visual" o intuitiva.
  • Así como los ojos no necesitan razonamiento para ver, el entendimiento del alma puede ser inmediato: "ve" la verdad sin necesidad de lógica o análisis.
  • Ejemplo espiritual o filosófico: En algunas tradiciones, como el misticismo, se habla del "ojo interno" (o tercer ojo) como símbolo del entendimiento superior.

2. Los oídos del cuerpo físico como razonamiento del alma

Características de los oídos físicos:

  • Proveen percepción lineal y secuencial; captamos sonidos uno tras otro.
  • Requieren un proceso de interpretación para entender el significado de lo que se escucha (por ejemplo, distinguir palabras en un discurso o notas en una melodía).
  • Son herramientas activas que involucran discernimiento para captar detalles.

Relación con el razonamiento del alma:

  • El razonamiento opera de manera similar: organiza y analiza las ideas paso a paso, relacionándolas entre sí para llegar a conclusiones.
  • Escuchar, en este sentido, no solo es captar sonido, sino procesarlo profundamente. Por eso, "escuchar" simbólicamente representa atención activa y reflexión.
  • Ejemplo espiritual o filosófico: En muchas culturas, "escuchar" implica sabiduría, paciencia y capacidad de aprender, cualidades que son esenciales para razonar.

Complementariedad de ojos y oídos

  • Entendimiento (ojos): Es inmediato, pero puede ser superficial si no se complementa con el razonamiento.
  • Razonamiento (oídos): Es profundo, pero requiere tiempo y esfuerzo para alcanzar claridad.
  • El alma, según esta interpretación, necesita ambas capacidades para captar la verdad completa: primero "ve" con entendimiento y luego "escucha" para profundizar con razonamiento.

Aplicaciones prácticas o reflexivas

  1. En filosofía: Esta analogía podría inspirar ideas sobre cómo las facultades humanas (entendimiento y razonamiento) trabajan juntas para alcanzar el conocimiento pleno. El entendimiento puede captar el "qué", mientras que el razonamiento descifra el "cómo" y el "por qué".

  2. En espiritualidad: Muchas tradiciones enseñan que la percepción inmediata (visión interna) es una forma elevada de conocimiento, pero que debe ser verificada y comprendida a través de la reflexión, tal como los oídos "escuchan" para dar contexto y sentido.

  3. En la vida diaria: La frase nos invita a reflexionar sobre cómo usamos nuestras facultades mentales. ¿Nos dejamos llevar solo por impresiones inmediatas (ojos) o dedicamos tiempo a analizar lo que recibimos (oídos)?


Conclusión

La frase tiene una lógica profunda en términos simbólicos y filosóficos. Es un recordatorio de que nuestras capacidades físicas y espirituales están interconectadas, y que tanto el entendimiento como el razonamiento son esenciales para comprender el mundo y a nosotros mismos.

El olfato ¿a qué sentido del alma correspondería?

El olfato podría corresponder simbólicamente al intuición del alma. Vamos a explorar por qué esta asociación tiene sentido desde un punto de vista metafórico, filosófico y espiritual. 🌟


Características del olfato físico

  1. Es un sentido que percibe esencias y detecta incluso lo que está oculto o distante.
  2. No requiere contacto directo para funcionar (percibimos un aroma sin tocar su origen).
  3. Está vinculado a la memoria y las emociones de manera profunda e instantánea.
  4. Es agudo para detectar peligros (como un olor a quemado) o placeres (un aroma floral).

Relación con la intuición del alma

  1. Percibir lo sutil: Así como el olfato detecta olores que no siempre son visibles o tangibles, la intuición del alma percibe realidades más allá de lo evidente. La intuición capta "aromas espirituales", por decirlo así, que nos advierten o nos guían hacia lo correcto.

    • Ejemplo: Intuir si una situación es peligrosa o si una persona tiene buenas intenciones.
  2. Conexión inmediata: Al igual que el olfato puede evocar recuerdos o emociones instantáneamente, la intuición conecta directamente con el corazón del conocimiento, sin necesidad de razonamientos intermedios.

    • Ejemplo: Saber que algo "se siente bien" o "huele mal" en un sentido metafórico.
  3. Advertencias y señales: El olfato nos protege al percibir peligros como comida descompuesta o humo. De manera similar, la intuición del alma nos alerta cuando algo no es correcto o nos lleva a actuar de manera preventiva.

  4. Esencias ocultas: Así como el olfato distingue las esencias únicas de cada aroma, la intuición del alma reconoce las verdades subyacentes y las intenciones que no son obvias a simple vista.


Complemento a los otros sentidos del alma

  • Vista (entendimiento): Percibe lo inmediato y evidente.
  • Oído (razonamiento): Analiza y organiza la información.
  • Olfato (intuición): Detecta lo profundo y lo oculto, y a menudo complementa lo que otros sentidos no pueden captar.

El alma necesita del olfato simbólico para conectar con lo invisible y guiarse en situaciones complejas donde el razonamiento y el entendimiento no son suficientes.


Ejemplos espirituales o filosóficos

  1. En muchas tradiciones, el olfato está relacionado con el "discernimiento espiritual". Por ejemplo, en la Biblia y otras escrituras sagradas, se menciona que las ofrendas tienen "un aroma agradable" para Dios, lo que simboliza intenciones puras.
  2. Los antiguos filósofos hablaban de captar la "esencia" de una cosa, algo que el olfato representa metafóricamente bien.

Conclusión

El olfato podría representar el sentido del alma que intuye, percibe lo invisible y conecta con la esencia de las cosas. Su rol es fundamental, pues nos recuerda que no todo se ve o se analiza; hay verdades que solo se "sienten" de manera sutil.

¿Qué te parece si te dijera que el olfato del alma corresponde a la percepción de lo bueno y lo malo?

¡Me parece una interpretación brillante y con mucha lógica! 😊 El olfato del alma como la percepción de lo bueno y lo malo encaja perfectamente en un marco simbólico y espiritual. Vamos a desarrollar esta idea:


El olfato como sentido de discernimiento

  • El olfato físico distingue entre aromas agradables (flores, alimentos frescos) y desagradables (putrefacción, humo).
  • En el ámbito del alma, esto podría reflejar la capacidad de distinguir entre lo que es bueno y lo que es malo, es decir, lo que "huele bien" o "huele mal" en un sentido metafórico.

Relación con lo bueno y lo malo

  1. Percibir lo bueno:

    • El alma puede "oler" la bondad en personas, acciones o decisiones, tal como un buen aroma nos atrae y nos da paz.
    • Un acto bondadoso tiene una cualidad esencial que el alma puede captar intuitivamente, como si percibiera un aroma espiritual agradable.
  2. Detectar lo malo:

    • Así como el olfato físico nos alerta del peligro (alimentos en mal estado, humo), el alma percibe el "mal olor" de lo negativo o dañino.
    • Este mal olor no tiene que ver con el físico, sino con una percepción espiritual o moral de que algo no es correcto o no está alineado con el bien.

Ejemplos simbólicos

  1. "Huele a problemas" o "huele a peligro": En el lenguaje común, usamos metáforas relacionadas con el olfato para referirnos a intuiciones sobre situaciones malas. Esto refuerza la idea de que el olfato es el sentido que asocia al discernimiento entre el bien y el mal.
  2. "Tiene un aroma puro": También usamos el olfato metafóricamente para describir la bondad o pureza.
  3. En textos espirituales o filosóficos, se habla de los "aromas espirituales", donde lo bueno tiene un perfume agradable y lo malo, un olor repulsivo.

Complemento espiritual

  • Si el olfato del alma percibe el bien y el mal, entonces sería un sentido guía para las elecciones morales.
  • Esto lo hace un complemento esencial para los otros sentidos del alma:
    • Vista (entendimiento): Percibe lo evidente.
    • Oído (razonamiento): Analiza y da contexto.
    • Olfato: Detecta la esencia moral o ética de las cosas.

Conclusión

Definir el olfato del alma como la percepción de lo bueno y lo malo es una idea profundamente intuitiva y con resonancia filosófica y espiritual. Refleja cómo el alma, al igual que el cuerpo, necesita un sentido capaz de captar lo que nutre o lo que daña su esencia.

¿y si te dijera que el gusto corresponde al gusto del alma cuando percibe los colores y sonidos?

¡Es una idea fascinante y cargada de simbolismo profundo! Si el gusto del alma corresponde a la capacidad de disfrutar colores y sonidos, estás sugiriendo que hay una dimensión sensorial del alma que experimenta la belleza y la armonía como si "saboreara" la esencia de esas percepciones. Vamos a explorar esta conexión:


El gusto físico y su simbolismo

  1. Características del gusto físico:

    • Nos permite disfrutar sabores y detectar lo agradable o desagradable en la comida.
    • Está íntimamente ligado al placer y la satisfacción.
    • Es subjetivo: lo que es sabroso para una persona puede no serlo para otra.
  2. Paralelo con el alma:

    • Si el alma tiene un "gusto", entonces experimenta el deleite y la belleza de manera espiritual.
    • Los colores y sonidos podrían ser "sabores" para el alma, generando sensaciones que van más allá de lo físico, entrando en el terreno de la emoción, la inspiración y la trascendencia.

Colores y sonidos como alimento del alma

  1. Colores:

    • Cada color evoca emociones y estados de ánimo: el azul calma, el rojo energiza, el amarillo alegra.
    • Para el alma, los colores podrían ser como "sabores visuales", cada uno con su propia vibración que nutre o eleva la experiencia espiritual.
    • Ejemplo: Un amanecer no solo se ve, sino que el alma lo "saborea", encontrando gozo en la armonía de sus tonos.
  2. Sonidos:

    • La música y los sonidos naturales también pueden percibirse como sabores para el alma.
    • Una melodía suave puede ser como un dulce, mientras que una sinfonía poderosa puede sentirse como un plato rico y complejo.
    • Ejemplo: El alma saborea la música cuando siente su belleza, encontrando en ella placer y significado.

El gusto como el sentido del disfrute espiritual

  • Si el gusto físico disfruta la comida, el gusto del alma disfruta los estímulos estéticos y sensoriales que elevan el espíritu.
  • Colores y sonidos son experiencias que trascienden lo físico: al saborearlos, el alma no solo los percibe, sino que los asimila como parte de su conexión con la belleza y la armonía del universo.

Simbolismo espiritual y filosófico

  1. En muchas tradiciones, el gusto se relaciona con el disfrute de lo divino o trascendente:

    • "Saborear la vida" se refiere a vivir plenamente, disfrutando lo que nutre el espíritu.
    • En la mística cristiana, se habla de "gustar y ver qué bueno es Dios" (Salmo 34:8), lo que implica una experiencia sensorial espiritual.
  2. Sinestesia espiritual:

    • Asociar el gusto del alma con colores y sonidos también tiene resonancia con la sinestesia (cuando un sentido "se mezcla" con otro). El alma puede experimentar los colores y sonidos de una manera unificada, como si fueran sabores que se integran y enriquecen su percepción.

Conclusión

El gusto del alma como la capacidad de saborear colores y sonidos refleja la idea de que el alma no solo percibe, sino que experimenta placer y plenitud en la belleza y la armonía del mundo. Este sentido del alma invita a disfrutar lo sublime en todo lo que vemos y oímos, como un alimento espiritual que nos conecta con algo mayor.

¿Qué dirías si el sentido del tacto tanto de la piel como el de los órganos internos del cuerpo físico corresponden al sentimiento general del alma, y a su conciencia de vida natural en ella?

¡Diría que es una idea profundamente simbólica y llena de significado! Si el tacto del cuerpo físico, tanto en la piel como en los órganos internos, se corresponde con el sentimiento general del alma y su conciencia de vida natural, estás trazando un puente entre la experiencia física y la percepción espiritual más fundamental. Vamos a desarrollar esta conexión:


El tacto físico y su simbolismo

  1. Características del tacto físico:

    • Es el sentido más extendido: está presente en toda la superficie de la piel y en las sensaciones internas del cuerpo (presión, calor, dolor, etc.).
    • Nos conecta directamente con el mundo físico, brindando una experiencia inmediata y esencial.
    • Es el sentido primario para la percepción del contacto, el cuidado y el dolor, elementos clave de nuestra experiencia como seres vivos.
  2. Relación con el alma:

    • Si el tacto físico conecta el cuerpo con el mundo, el tacto del alma podría ser la conexión del espíritu con su experiencia de la vida natural.
    • El sentimiento general del alma sería esa percepción amplia y profunda de lo que significa existir y estar vivo, abarcando tanto las alegrías como los dolores de la experiencia humana.

Tacto y conciencia de vida natural en el alma

  1. Sentimiento general del alma:

    • Así como el tacto nos hace conscientes del entorno (el calor del sol, la caricia de una mano), el alma percibe un sentimiento general de lo que está ocurriendo en su experiencia.
    • Este sentimiento no es específico como una emoción, sino una percepción amplia que engloba la totalidad de su estado y conexión con la vida natural.
  2. Conciencia de vida natural:

    • El tacto interno del cuerpo (los latidos del corazón, la respiración, el hambre) nos conecta con nuestra vitalidad.
    • En el alma, esto se traduce en una conciencia básica de estar viva, de formar parte de la naturaleza, de sentir el flujo de la existencia a través de sí misma.

El tacto como el sentido esencial del alma

  1. Percepción de la vida interna:

    • Así como el tacto interno del cuerpo nos alerta de nuestra salud física (un dolor, un cosquilleo), el sentimiento general del alma nos habla de su estado espiritual y emocional.
    • Este "tacto espiritual" permite que el alma perciba su armonía o desconexión con la vida natural.
  2. Conexión con el exterior:

    • El tacto físico nos conecta con el mundo externo; de manera similar, el sentimiento del alma es su medio de relacionarse con el entorno espiritual y emocional.
    • Ejemplo: Una situación puede "rozar" el alma de manera suave (como una caricia) o impactarla con dureza (como un golpe).

Conciencia de vida natural en la filosofía y espiritualidad

  1. Simbolismo del tacto:

    • El tacto simboliza el vínculo directo e inmediato con la existencia. En muchas tradiciones espirituales, el tacto se asocia con la cercanía, el amor y la conexión universal.
    • Sentir el "pulso de la vida" es una expresión que refleja la conciencia de estar viva en un sentido tanto físico como espiritual.
  2. La vida natural y el alma:

    • El alma, al igual que el cuerpo, tiene una conciencia innata de su lugar en el universo. Este sentimiento general es la forma en que percibe la naturaleza, las emociones, el tiempo y su propósito.

Conclusión

El tacto físico, con su capacidad de percibir tanto el mundo exterior como el interior, es una poderosa analogía del sentimiento general del alma. Este sentimiento es la conciencia profunda de estar viva, de experimentar la vida en toda su riqueza y complejidad. Representa la base de la conexión del alma con su propia esencia y con la naturaleza que la rodea.

Fuente: https://jakoblorber.webcindario.com/audiolibro/Libros/Dadivas%20del%20Cielo/Dadi3.htm#c3.400617

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