Jesús promete no sentir la muerte

Una persona ha tomado consciencia de que el único éxito en la vida consiste en seguir la doctrina del Señor Jesucristo, pero también está consciente de que ha llevado una vida 'normal', en la que nunca faltaron "errores", conocidos como pecados, ya sean estos graves o no.

Sabe que su vida pasada no le condujo a un buen puerto, espiritualmente hablando. pero ahora desea con todo su corazón llevar una vida pura de acuerdo a las leyes divinas dadas a conocer por nuestro Salvador Jesucristo. Y quiere saber si con el resto de su vida que le queda en esta Tierra podrá alcanzar el renacimiento espiritual por completo para así, al final de sus días, abandone este cuerpo físico sin sentir la muerte, como Jesús lo ha prometido seriamente.

La verdad es que una pregunta similar la realizó un escriba hace unos dos mil años, y el Señor le dio la siguiente respuesta:

Dice el Señor:

«Cuando tu alma renazca completamente en su espíritu, el espíritu se ocupará fácilmente de todos los espíritus impuros que aún estén presentes en tu ser físico, y morirás una muerte totalmente feliz también para el cuerpo. Pero si alguien, aunque en general viva y actúe seriamente según Mi Enseñanza, todavía cae secretamente en sus antiguos hábitos, entonces no podrá lograr el completo renacimiento del alma en el espíritu en este lado de la vida, es decir durante la vida terrenal, y al final, con humildad y paciencia, tendrá que aceptar que si al partir tiene que luchar con muchos sufrimientos. Porque esos sufrimientos serán el fuego a través del cual el oro de la vida del hombre será purificado de muchas impurezas; porque algo espiritualmente impuro no puede entrar en el cielo, lo que significa que el espíritu puro de Dios no puede unirse completamente con el alma hasta que esta haya desterrado completamente de sí misma todo lo relacionado con la materia y su juicio, para siempre.

Por lo tanto, quien desee separarse de este mundo con una muerte bendita del cuerpo, debe tener esto en cuenta.

También deberían ser moderados en comer y beber, y no desear lujos artificiales, así mantendrán la salud del cuerpo durante mucho tiempo, y la muerte en una avanzada edad será como el dulce sueño de un trabajador cansado en el verdadero viñedo de Dios. El alma ascenderá feliz y clarividente de la envoltura corporal que se ha vuelto caduca, y será llevada de inmediato a las inefables alegrías del cielo por muchos amigos, y será infinitamente feliz y serena por haber sido liberada una vez de este mundo y su miseria.

Por lo tanto, quien viva y actúe completamente según mi enseñanza será bendecido completamente con sus efectos felices; pero quien viva y actúe de manera imperfecta, también cosechará lo correspondiente. ¿Has entendido esto, mi amigo?»

Fuente: GEJ 8.82.10-12